Los responsables de la desaparición del ex gobernador de Salta, Miguel Ragone, "el médico del pueblo", como se lo conocía, fueron condenados hoy, y tras 35 años volvió a resonar la consigna: Memoria, Verdad y Justicia.
Ragone, el único ex gobernador desaparecido durante la dictadura militar, fue secuestrado el 11 de marzo de 1976, tenía 55 años.
Miguel Ragone nació en San Miguel de Tucumán el 25 de mayo de 1921, era hijo de inmigrantes napolitanos y el tercero de ocho hermanos de una familia humilde.
Llegó a Salta cuando tenía 12 años e ingresó al Colegio Nacional, de donde egresó como bachiller, para luego ingresar a la carrera de abogacía que abandonó para dedicarse a la medicina en Capital Federal.
A punto de finalizar su carrera, mientras trabaja y estudiaba, junto a su compañero en la especialidad de neurocirugía, Raúl Matera, fue convocado por el entonces ministro de Salud de Juan Domingo Perón, Ramón Carrillo, para que se desempeñara como secretario privado y colaborador del Plan de Salud, y luego como director del Hospital Neurosiquiátrico en Salta.
Con la inauguración del Hospital, Ragone se transformó en su primer director y tiempo después entró de lleno a la política salteña.
A principios de los 70, Ragone pasó a liderar la Lista Verde con la identificación del "médico del pueblo", calificativo con el que se presentó como candidato a gobernador por el justicialismo salteño el 11 de marzo de 1973.
Ragone obtuvo casi 121.500 votos, poco más del 57 por ciento de los votos del padrón electoral.
Sin embargo, su gestión fue intervenida el 23 de noviembre de 1974 durante el gobierno de Isabel Martínez de Perón, quien en el decreto le endilgó a Ragone “una total desvinculación respecto de los básicos lineamientos nacionales” y de “una manifiesta ineficacia represiva frente a la acción de fuerzas cuya actividad fue puesta al margen de la ley”, en referencia a Montoneros.
Casualidades, ¿o no?, también un 11 de marzo de 1976, trece días antes del golpe militar, Ragone, quien había vuelto a trabajar de médico, fue secuestrado por un grupo de entre siete y doce hombres, fuertemente armados, que se desplazaron por una ciudad "liberada".
Ragone conducía su Peugeot 504 rumbo al consultorio, pero en la esquina de Del Milagro y Apolinario Saravia, fue interceptado por un grupo armado que bloqueó su paso con otros vehículos (una Chevy, un Falcon y un Fiat 125 Berlina que habían sido robados, tres días antes en la ciudad santiagueña de Termas de Río Hondo.
En medio de forcejeos y algunos disparos, Catalino Arredes, el almacenero de la esquina, murió acribillado y otra testigo, Margarita Martínez de Leal, fue herida de gravedad. Sus historias también fueron juzgadas en este proceso.
Eran las 8.30 de un jueves lluvioso en el que Ragone se convirtió en el único ex gobernador desaparecido de la Argentina.
En octubre del 2004, se reabrió la causa sobre la desaparición de Ragone y de su investigación se desprende que habría existido una orden superior para realizar el operativo, avalado por el responsable del Tercer Cuerpo, Luciano Benjamín Menéndez y Antonio Domingo Bussi, jefe del Operativo Independencia,
instrumentado desde febrero de 1975 en Tucumán y extendido a todo el país, para “aniquilar el accionar de los elementos subversivos”.
instrumentado desde febrero de 1975 en Tucumán y extendido a todo el país, para “aniquilar el accionar de los elementos subversivos”.
Ambos, que tienen la suerte de tener un juicio justo, fueron apartados de este proceso por cuestiones de salud.
Hoy se escuchó la sentencia, pero para la familia de Ragone el duelo seguirá, ya que, como en la mayoría de los casos, el cuerpo del "médico del pueblo" sigue sin aparecer. (Télam)
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